La tercera edad es una etapa de la vida en la que se dan cambios a nivel físico tales como problemas con la vista, audición, habla, cambios a nivel cognitivo tales como pérdida de memoria y cambios sociales derivados de la incapacidad para participar en actividades que antes la persona solía realizar.

En esta etapa se pierden amigos queridos y se reflexiona sobre la propia vida. Todo ello hace que la persona anciana transite diferentes estados emocionales que pueden dar lugar a tristeza, ansiedad, soledad, miedo, baja autoestima, apatía y aislamiento.

Las flores de Bach pueden ayudar mucho a nuestros ancianos cuando viven diferentes situaciones.

En la adaptación al cambio, para ayudar a adaptarse a las nuevas condiciones de vida, también cuando estos cambios son por cambio de casa, residencia o cuidadores.

Cuando la persona vive en el pasado, rememorando tiempos mejores en una nostalgia continua. Otras veces la persona se ausenta, está en su mundo particular y se evade dejando de estar y disfrutar del presente.

Ante la sensación de que ya no queda tiempo cuando la persona entra en la irritabilidad y la prisa. Es muy común que en esta edad se pierda rápidamente la paciencia y en algunos casos, junto a la impaciencia se presenta una marcada intolerancia.

Otras veces por miedo a la soledad abruman a los demás hablando por ejemplo de enfermedades, por necesitar atención en forma casi permanente.
Nuestros ancianos pueden sentir culpa por creer que constituyen una carga para los hijos, por no poder autoabastecerse, por necesitar ayuda en cualquier aspecto.

O por el contrario tener sentimientos de amargura y resentimiento por pensar por ejemplo que la familia o la vida los ha tratado mal.

En esta etapa se acrecientan los miedos a la enfermedad, al sufrimiento, a la soledad y a perder a personas de su edad, seres queridos y amigos con el consiguiente impacto emocional.
Es habitual que en ese momento de la vida se sientan vulnerables o incapaces de muchas cosas, y esto puede dar lugar a situaciones de apatía y desesperanza.

El apoyo emocional que pueden brindar las Flores de Bach en esta etapa de la vida es realmente sorprendente y beneficioso.